Pero situémonos desde el principio, retrocedamos unos 4000 años para comenzar el viaje y así nos encontraremos con la primera obra literaria y con el primer héroe, Gilgamesh que murió buscando precisamente la inmortalidad, la fama y la gloria. A partir de aquí emprenderemos un recorrido por todas las etapas históricas y literarias hasta llegar al término de la exposición a la actualidad y a nuestra propuesta final: construir un héroe imaginario, el héroe que todavía no existe, el “héroe de todos”, entre todos los visitantes de la exposición.
A lo largo del camino nos encontraremos con el héroe mítico, con la heroína, con el villano, con el antihéroe, con el héroe anónimo, que jamás quiso serlo y sin embargo lo fue, y con los personajes con superpoderes del cómic moderno y el cine.
Mientras recorremos el Museo, cuya apariencia es la de un túnel construido en un patio abierto e iluminado por luz cenital, vamos pasando por diferentes momentos históricos. Nos acompañarán constantemente un desfile de héroes y heroínas dispuestos a proporcionarnos cuanta información requiramos o ayudarnos en nuestro desplazamiento, si tuviéramos alguna dificultad para ello. En cada “estación” de este viaje, siluetas a tamaño natural de algunos superhéroes representativos del momento histórico aparecen allí representadas que actuarán de “cicerone” introduciéndonos en cada tiempo y escenario.
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